Nuestra historia
Se podría decir que Jijona es el lugar de origen de la tradición de La Flor Valenciana, este pueblo es la cuna del turrón, situado en el lugar perfecto, con el clima perfecto para que se dé la almendra de la variedad Marcona, la que se utiliza para la elaboración del turrón. Si las familias jijonencas se dedicaban antiguamente a la industria del turrón, es cierto que buena parte del año se quedaban parados, sin trabajo, lo cuál les llevó a buscar una forma de ganarse la vida durante la otra parte del año. Resultó así que las familias aprendieron dos negocios de temporada, uno para el invierno y otro para el verano, el turrón y el helado.
Pues la familia de la Flor Valenciana era una de ellas. Fue hace ya muchos años cuando el abuelo aprendió el oficio, y solía desplazarse hasta Argelia, donde comenzó a vender helados y a coger experiencia. Cuando la situación se volvió complicada, decidió establecerse. Viajó por España y se enamoró de Ávila.
Nacía así La Flor Valenciana, en 1927. Elaboraba los helados en un garaje, con el hielo que le traían por las mañanas, y los vendían de forma ambulante en los carritos. Con el paso del tiempo, compraron una casita de madera y montaron allí la tienda. Poco a poco ha ido evolucionando, sufriendo alguna reforma hasta convertirse en lo que los abulenses conocen hoy como La Flor Valenciana, o ¡“los valencianos”, como muchos nos llaman!.
Nuestra heladería/turronería es un vivo recuerdo de toda esta historia, con las fotografías antiguas y uno de los carritos que se usaban entonces para vender helados.
Aún a día de hoy tenemos muchas personas que nos cuentan cómo de niños venían a comerse un coyote, un “palo de pela de polo”, o los plátanos rellenos, que ¡aún seguimos haciendo como antaño!.
Nuestra materia prima
Somos un negocio familiar y artesano, y nos encanta poner en valor la materia prima de calidad en nuestras recetas, tanto las clásicas como las más innovadoras.
Encontrarás durante la temporada de invierno, turrones hechos con la misma receta de antaño, para continuar con la tradición, usando únicamente almendra marcona, en el porcentaje más alto, dando como resultado lo que se conoce como el “turrón suprema oro”, una nomenclatura para diferenciar al buen turrón. Miel de azahar, nueces, canela Ceylan, nueces de macadamia, son otros de los muchos ingredientes que encontrarás en nuestros productos.
Durante la temporada de verano mantenemos nuestra misma filosofía, trabajar siempre con productos de primera calidad, desde la leche, la nata, los frutos secos, los chocolates o la fruta. De hecho, nuestro famoso helado de turrón está elaborado triturando el propio turrón que vendemos en invierno, hasta conseguir una suave crema.
Si bien es cierto que mantenemos muchas de las recetas que hacíamos antaño, también nos actualizamos continuamente, creando productos nuevos y renovando otros. Nacieron así, por ejemplo, los helados de oreo o brownie, ¡aunque ya se podría decir que se han convertido en todos unos clásicos!, o en la temporada de navidad, creamos los polvorones de doble chocolate que ya tantos adeptos tienen.